Agadir, cuya ciudad fue hecha a propósito para acoger el turismo, tiene como principal reclamo una larga y ancha playa que cubre casi diez kilómetros de línea de costa y que se funde en el horizonte. Es un paraíso para los amantes de los días de playa que no necesitan más que una porción de arena, un buen sol y el mar enfrente de ellos.
La arena de la Playa de Agadir es de un amarillo oscuro y da la sensación que está siempre mojada. Las aguas que acaban en su orilla son muy tranquilas, las cuales hacen que sean perfectas y seguras para los nadadores. De todos modos, hay que prestar atención a las señales que indican las zonas donde puede haber corrientes, ya que pueden hacer pasar un mal rato a principiantes o niños pequeños.
La playa es bastante completa en cuestión de equipamiento, donde hay secciones con sombrillas, tumbonas y otros elementos playeros que se pueden alquilar por un módico precio. De todos modos, muchas personas prefieren simplemente tirar la toalla en la arena y tumbarse directamente.
También se puede alquilar equipamiento deportivo, como por ejemplo esquíes o barcos de vela. Otra opción es alquilar un camello o caballo para dar un paseo por la playa y poder ver la belleza a nuestro alrededor según cabalgamos.
Aunque se considera Agadir como una gran playa, lo cierto es que tiene varias más que también se pueden visitar. Cada una de ellas tiene su atractivo, lo cual invita a buscar la que más nos guste. Hay que tener en cuenta también que las aguas fuera de temporada pueden estar un poco frías, siendo entre Mayo y Octubre los meses donde el mar es más cálido.
Las playas son lo suficientemente grandes poder albergar muchos juegos con muchas personas, como puede ser el voleibol de playa, futbol y otros juegos donde la playa se convierte en el campo de las actividades.
Hay policías de playa que patrullan el área de Agadir para asegurarse de que todos los visitantes están seguros. Hay que tener en cuenta también que Agadir no es la típica ciudad marroquí con profundas raíces culturales.
Si queremos experimentar el estilo de vida marroquí de una forma más profunda, hay que aventurarse fuera de las fronteras de Agadir, y en otras ciudades cercanas como Talbortj. Toda la línea de costa está plagada de perfectas playas que se pueden visitar, por lo que tenemos posibilidad de investigar fuera de Agadir. De hecho, es buena idea alquilar un coche y recorrer toda la zona próxima a Agadir para descubrir pueblos y playas magníficas.
Tanto dentro de Agadir como en toda la línea de costa, hay restaurantes y cafeterías para parar a comer o tomar algo. Los platos más típicos que se pueden encontrar son sobre todo el pescado a la parrilla con especies muy sabrosas, entre otros platos del país. Después de comer, podemos tomar un café al estilo marroquí. Un buen paseo por la playa después de comer, es una perfecta manera de hacer la digestión.