Si hay una criatura que recordamos a menudo cuando vamos a la playa, esa es la medusa. Las medusas son probablemente uno de los seres más inusuales y misteriosos que puede haber en el reino animal. Con sus cuerpos gelatinosos y largos tentáculos, parecen algo sacado de una película de ciencia ficción más que de unas criaturas marinas. Si dejas de lado su extraño aspecto – y el factor de que si te acercas demasiado te puedes llevar una buena picadura – verás quelas medusas son realmente fascinantes.
Han estado en el mundo desde hace millones de años, y hay miles de especies diferentes, donde se descubren continuamente nuevas especies. Las medusas viven principalmente en el océano, pero no son realmente peces – son plancton. Estos animales flotan en el agua o al tener tan poca capacidad de nadar, son simplemente arrastrados por la corriente. Varían en tamaño, donde los tentáculos les dan un mayor volumen.
Están formadas por casi un cien por ciento de agua. Si una medusa acaba en la playa, lo normal es que desaparezca según el agua se va evaporando. La mayoría es transparente y en forma de campana. Sus cuerpos tienen una simetría peculiar, lo cual significa que las partes del cuerpo se extienden desde un punto central como los radios en una rueda. Si cortas una medusa por la mitad en cualquier punto, siempre tendrás mitades iguales ya que el cuerpo es muy simple y básico – no tienen huesos, cerebro o corazón. Para ver la luz, detecta olores y se orientan de esta manera. Tienen un sistema nervioso rudimentario en la base de sus tentáculos.
Una medusa coge su nombre de la criatura mitológica que tenía serpientes en lugar de cabello y que podía convertir a cualquiera en piedra solo con mirarlo. La forma que tienen de procrearse es al soltar la medusa macho el semen en el agua, el cual nada hasta el orificio de la medusa hembra y fertiliza los huevos.
Varias docenas de medusas pueden salir de estos huevos al mismo tiempo. Finalmente se dejan arrastrar por la corriente y buscan una superficie rocosa donde pegarse. Cuando se quedan pegados a la roca se vuelven pólipos – cilindros huevos con una boca y tentáculos en la parte superior. Luego se convierten en jóvenes medusas que ya tienen autonomía para moverse a otros sitios. Puede vivir entre tres y seis meses.
Aunque puedas pensar que las medusas son algo que realmente no hacen nada por su naturaleza tan lineal, la verdad es algo diferente. Parece que es algo sacado de una antigua película de monstruos marinos, pero las medusas han causado daños en la industria pesquera de varios países y han ocasionado picaduras mortales a personas.
Fueron las responsables del cierre temporal de una planta nuclear después de que atascaran el sistema de refrigeración. De todos modos, son los japoneses los que más provecho has sacado a las medusas que capturan, y es secarlas, salarlas y luego comerlas. De todos modos, lo que más preocupa en general es su picadura.
La picadura de medusa

Lo primero que hay que saber es que las medusas son carnívoras – comen a otros animales. Las medusas más pequeñas comen algas y plancton. Las medusas más grandes comen crustáceos y otros animales acuáticos más grandes.
Tenemos que recordar que no van en busca de humanos para atacarles – su sistema nervioso es demasiado simple para hacer eso. La picadura de medusa es tanto un mecanismo defensivo como una manera de capturar a sus presas.
Cada tentáculo de las medusas está cubierto de miles de células llamadas cnidoblastos las cuales contienen elementos punzantes. Cuando una medusa se encuentra con un objeto, presión dentro de los cnidoblastos causa que se revelen estos pequeños elementos punzantes, los cuales a su vez expulsan un veneno.
Es como si cientos de diminutos dardos con veneno lanzaran su carga hacia el objeto. El veneno es una neurotoxina diseñada para paralizar a la presa. Aunque una medusa puede matar a presas pequeñas, su picadura no suele ser mortal para los humanos. Solo suele causar dolor, enrojecimiento de la zona, y en algunas ocasiones fiebre y calambres musculares.
La cantidad de dolor y la reacción a la picadura de una medusa depende de la especie – las medusas más grandes tienen más cantidad de células venenosas en los tentáculos que pueden penetrar más profundamente en la piel, y algunas medusas tienen un veneno más fuerte que otros.
Cuando estás en la playa, hay que prestar atención de que haya medusas en el agua y en la arena. Incluso si un tentáculo ha sido separado del cuerpo, puede seguir picando.
Si te pica una medusa, lo primero es separar cualquier tentáculo que se haya quedado pegado a la piel. No laves la zona con agua dulce, ya que puede liberar más veneno en el cuerpo. En lugar de esto, límpialo con alcohol, amoníaco, vinagre o incluso orina. También se puede aplicar una mezcla de bicarbonato y agua.

De todos modos, ante cualquier caso de reacción alérgica, como puede ser falta de respiración, malestar, mareos u otros síntomas, hay que buscar de inmediato atención médica. Lo cierto es que las medusas tienen una buena protección contra los depredadores. Su picadura aleja a sus atacantes y al tener cuerpos transparentes, se pueden ocultar mejor.
Algunos animales comen medusas, como son las tortugas, los peces espada y otros. Algunos peces incluso viven encima o incluso dentro de las medusas. Se ocultan entre sus tentáculos para protegerse de sus predadores hasta que son adultos. De todos modos, en algunos sitios, como es Japón, las medusas se consideran un plato exquisito.
A parte de las picaduras ocasionales que pueden provocar estos animales, en algunas partes del mundo han encontrado ciertos problemas con el aumento de su población. Los científicos creen que este aumento es por los nutrientes adicionales que hay en el agua, el cambio climático y las tareas pesqueras más cerca de la costa.
Aunque la mayoría de las medusas no son peligrosas para el hombre (solo una molestia si somos picados). Hay algunas que pueden ser un verdadero problema para nosotros, e incluso puede llegar a ser mortal. Una de estas medusas, de las cuales es mejor alejarse, es la medusa carabela portuguesa.
La picadura de esta medusa es muy dolorosa y puede ocasionar síntomas como escalofríos, fiebre, nauseas, vómitos y acabar un shock total. En algunos casos, finalmente esta reacción lleva a la muerte. Otra medusa considerada muy peligrosa es la avispa de mar, la cual suele estar en aguas más tropicales.