Hay muchas cosas que nos pueden dejar sin aliento, aparte de correr un maratón o subir a altitudes muy altas. Ver un concierto de un grupo que te gusta mucho o ver una buena película puede tener este efecto. Puede también pasar por una cosa que nos pase en nuestra vida privada, como el nacimiento de un hijo o algún evento que nos coge de cerca.
Sin embargo, algunas veces no tiene porque ser un evento que nos ocurre a nosotros, sino una vista que se pone delante de nuestros ojos. Nos podemos quedar observando un paisaje frente a nosotros y quedarnos sin aliento.
Esto nos puede dar una idea de lo que muchos colonizadores sintieron cuando llegaron a ciertas zonas del mundo y se encontraron con vastos territorios que se perdían en el horizonte. Esta sensación puede ser muy similar a lo que un turista moderno puede tener cuando está frente a ciertas vistas que a continuación vamos a contar.
Hay muchos sitios en el mundo donde podemos ir para tener esta sensación que posiblemente los antiguos colonizadores sintieron. Uno de estos sitios lo podemos encontrar en la ciudad de nueva York.
Cuando vamos a esta inmensa ciudad, normalmente se recorre a pie para ver todo lo que se puede, y muchas veces apenas da tiempo a verlo todo. Las calles es donde la acción está, pero si realmente quieres tener una experiencia que te deje impresionado, no hay una mejor manera que coger el ascensor del Empire State Building y subir al observatorio que hay arriba del todo.
Desde los atentados de las torres gemelas, este antiguo edificio ha vuelto a ser el rascacielos más alto de la ciudad. El observatorio lo tenemos a más de 300 metros del suelo, y esto es algo que realmente impresiona. El observatorio nos da una vista panorámica total, lo cual no olvidaremos nunca.
Mientras que el anterior rascacielos ofrece las mejores vistas posibles en la ciudad de nueva York, la torre Eiffel hace exactamente lo mismo en París. Por otro lado, mientras que la llamada ciudad de las luces no tiene esa jungla de rascacielos que se puede ver en Nueva York, sigue teniendo unas vistas que nos dejarán impresionados cuando el ascensor nos lleve a la parte superior.

La torre Eiffel es la segunda estructura más alta de Francia y fue la más alta del mundo hasta que el Empire State Building fue terminado. Los ascensores hacen un viaje de subida y bajada cada ocho minutos, que son unos cien viajes al día. Dicen que el mejor momento es una hora antes de la caída del sol donde tenemos la llamada hora mágica, donde el océano de luces cobra vida según cae la noche.
Otra cosa que no podemos dejar pasar es el Gran Cañón, el cual recibe varios millones de visitas al año. Es algo que ya en fotografías deja impactado, pero que realmente hay que visitar para saber lo que es. Estar al borde del este gran cañón es algo que hay que poner a la lista para hacer en vacaciones o en algún momento que se pueda.
Los documentales y las fotos están bien, pero hay que ir para reconocer lo que realmente es. Este cañón tiene unos 450 kilómetros de largo y 30 en su punto más ancho. Son varias las partes que se pueden visitar, y cada una de ellas tiene algo que ofrecer. Por tanto, es buena idea informarnos bien de las rutas que podemos hacer para sacar el mayor provecho.
El Machu Pichu es otra de las cosas que debemos visitar si nos queremos quedar sin aliento. Está dividido en tres áreas, que son agricultura, el área urbana y la religiosa. Todas ellas están rodeadas de un entorno natural nos dejará hipnotizados. Al combinación de historia y misterio hace que sea una de las nuevas maravillas del mundo.
Las ruinas incas en este sitio han sido un sitio de investigación desde que fue descubierto en 1911. Mientras que algunas locales ya conocían con anterioridad este lugar, no fue hasta la fecha comentada cuando se iniciaron excavaciones y se empezaron a examinar cosas.
Nadie sabe exactamente porque los incas construyeron esta maravilla de la arquitectura, pero algunas teorías hablan de motivos religiosos o incluso de observatorios astronómicos. Cualquiera que sea el propósito de la visita, ver estas ruinas nos dejará una impresión difícil de olvidar.
Terminaremos esta parte del artículo con otras las cosas que tenemos disponibles, y es la cima del monte Everest. En este caso, la altitud nos dejará sin aliento si las vistas no lo hacen. El Everest se formó hace sesenta millones de años, y es el pico más alto (sobre el nivel del mar) de todo el planeta.
Debido a las condiciones meteorológicas que hay en la cima, los escaladores no suelen intentar el ascenso fuera de los meses de Mayo y Junio. Si te decides a realizar este ascenso, puede que te cruces con algún cuerpo que se quedó por el camino, ya que hay 120 cuerpos desaparecidos en la montaña que no han podido recuperar. De todos modos, no dejes que esto te eche atrás, porque estarás en la cima unos minutos antes de iniciar el descenso.
Los mejores paisajes que debemos ver

Si estamos por Estados Unidos, el parque nacional glacial es otro de los parques que son increíbles y que nos dejará sin aliento. Está localizado en Montana y tiene más de mil kilómetros de senderos y caminos por todo el parque.
Este parque es conocido por altos picos de montaña, sus aislados lagos, una abundante vida salvaje y por supuesto glaciares. De hecho, el parque recibe su nombre por los glaciares que tiene, los cuales dan una formación en sus picos que atrae turistas de todo el mundo. Sin embargo, debido al cambio climático ya quedan menos de treinta glaciales.
Las islas Galápago son otra maravilla natural con los mejores paisajes que te puedes imaginar. Cuando estas islas fueron descubiertas hace ya mucho tiempo, fue una auténtica revelación en cuestión de nuevas especies de plantas y animales. Casi doscientos años después, todas estas maravillas se mantienen igual para el disfrute de los visitantes.
A pesar de todo el turismo que ha crecido considerablemente en estas islas, están extremadamente protegidas para su perfecta conservación. Las maravillas que tiene no solo están en tierra, sino debajo del agua, donde los buceadores pueden encontrarse con cientos de especies entre peces, moluscos, cangrejos, estrellas de mar y conchas.
Si a esto le añadimos tortugas marinas gigantes, iguanas marinas, pingüinos, delfines y tiburones, está claro porque se han protegido tanto estas aguas. También es fácil entender que esté considerado de los mejores sitios del mundo para bucear.
El siguiente de los mejores paisajes que está en nuestra lista, no es tan fácil de ver. Por desgracia, la mayoría de nosotros tendremos que conformarnos con fotografías de alta resolución. Hablamos de la vista de la Tierra desde el espacio.
Ya existen proyectos para hacer viajes al espacio en un formato turístico, y puede que en pocos años estas vistas estén al alcance de la mayoría. Por ahora, solo los multimillonarios pueden pagar los más de 20 millones de dólares que se necesitan para apreciar esta vista desde una estación espacial.
Por último, tenemos la aurora boreal del norte. La aurora boreal es un resplandor brillante que ocurre en el cielo nocturno cuando partículas energéticas, principalmente electrones, entre en la parte superior de la atmósfera de la Tierra. Cuando entran en esta capa, colisionan con átomos y moléculas, las cuales toman algo de la energía y la almacenan creando átomos excitados.
La única manera de calmar este átomo es liberando energía expulsando un fotón. Esto produce el brillo que vemos desde la Tierra. Hay muchos tipos de auroras, pero la más conocida es la aurora boreal, también llamadas luces del norte. Son las más populares por sus variados colores en la zona polar del hemisferio norte. Se forman cortinas de brillos blancos, verdes, púrpuras y rojos en la oscuridad del cielo.
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