La bahía de Dakhla es una zona costera de Marruecos con un pueblo que despide antigüedad y color, y con una diversidad vibrante de maravillas naturales. Los escenarios que tenemos en Dakhla son de unas increíbles dunas de arena y unos acantilados que empiezan justo en la playa que se expande por toda la bahía.
La bahía de Dakhla está al sur del país, cerca del Sahara marroquí. La playa no está casi nunca conglomerada e incluso algunas veces podemos estar solos sin nadie a la vista. Hay algunos puntos muy buenos para nadar y hacer surf, por lo que para muchos de los locales es una de las mejores playas que hay en toda la zona.
La expansión de la playa es algo que impresiones, y la forma en la cual se despliega, nos permite disfrutar de zonas en forma de laguna que mantienen sus claras aguas turquesas.
Otras zonas son más abiertas, donde es ideal los que vienes con su tabla de surf o simplemente quieren practicar kitesurf. Una de las lagunas más impresionantes en la playa de Dakhla tiene una longitud de unos 25 kilómetros y es poco profunda, lo cual la hace perfecta para nadar, hacer buceo libre con escafandra, relajarse o tomar el sol.
También permite a los surfistas novatos practicar y empezar a aprender los mejores trucos para luego ponerlos en práctica en zonas más movidas. En la zona de esta laguna, hay un camping para poner la tienda de campaña si nos gusta esta forma de alojarnos. El lugar es perfecto para montar la tienda, ya que el camping está entre montañas que protegen bien del viento.
Por otro lado, también hay bungaloes en otra zona de la playa en el llamado campamento dragón, el cual fusiona estos asentamientos para alojarse de forma perfecta con la naturaleza. Los interiores de estos bungaloes son muy luminosos y con una aspecto rústico que ha muchos les encantará.
Aparte de hacer surf, kitesurf, nadar, bucear y tomar el sol, no hay muchas más cosas que hacer en la playa de Dakhla. Sin embargo tenemos disponibles excursiones a algunas a ciertas partes de la cosa, como la isla Dragón o el llamado Dune Blanche. Son excursiones muy entretenidas donde se incluyen muchas actividades para mantener a los visitantes encantados con el viaje.
La isla dragón es más popular por su criadero de ostras, donde el visitante puede degustar no solo ostras, sin varios tipos de marisco y la cata de algunos excelentes vinos. Se puede almorzar y comer en la isla, y después dar un paseo por la estupenda playa que tiene la isla. Se considera la visita a la isla dragón, como un día de relajación donde las actividades se mantienen simples: comer y descansar. A las 18:00 los visitantes son llevados de nuevo a la bahía de Dakhla.
Una cosas que debemos saber, es que Dakhla está cerca de un territorio disputado con Mauritania, por lo que si pasamos cerca de la frontera, hay que hacer caso de las señales que marcan como zonas restringidas, aunque no hay ningún peligro para el visitante.
Lo cierto es que la bahía de Dakhla no es para todo el mundo, y si se va buscando un ambiente de fiesta y muy movido, puede que no sea el lugar ideal. Sin embargo, si se quieren unas vacaciones de tranquilidad y descanso, es el lugar que hay que visitar.
Si visitamos Dakhla, podemos prepararnos para unos días de mucha arena y privacidad, y unas vacaciones que recordaremos durante mucho tiempo.
