La praia do forte es una de las playas más famosas de la bahía. Incluso los que no han estado nunca, probablemente han oído algo sobre esta playa sabe que es un destino muy popular en verano y en época de vacaciones.
La playa está localizada a unos 60 kilómetros de Salvador de Bahía, y tiene una gran infraestructura para los visitantes y turistas. Algunos dicen que esta playa está considerada como la polinesia brasileña, gracias a sus cristalinas aguas ya su abundante vida marina.
Es una playa donde se puede hacer prácticamente de todo. Es buena para hacer surf, para bucear, descansar en las muchas piscinas naturales existentes, hacer una excursión en barca, o simplemente relajarse tomando una cerveza en los varios locales y bares en primer línea de playa.
Esta playa de doradas arenas, está rodeada de palmeras y la temperatura suele ser templada todo el año, aunque entre Noviembre y Abril puede hacer bastante calor. De todos modos, un buen chapuzón y una bebida refrescante nos refrescarán cuando apriete el calor.
Praia do forte fue un pueblo pesquero antes de ser un famoso punto turístico, y tiene una playa de más de 8 kilómetros, con muchas piscinas naturales, como ya se ha comentado. Hay varios programas en marcha para estudiar la vida animal, donde las más destacables son la observación de las tortugas, que llegan a esta playa entre Septiembre y Marzo.
Una de las novedades más visitadas en praia do forte, son sus acuarios y tanques donde podemos apreciar mucha de la fauna marina de la zona, donde las grandes tortugas son un importante reclamo. Después de pasar el día en la playa, mucha gente se desplaza al pueblo para visitar los muchos bares y restaurante y para prepararse para la agitada vida nocturna que ofrece praia do forte.
Algunos de los sitios más conocidos son el bar Souza, el Noroña, y el Coisa e Tal, que es una panadería que sorprendentemente se convierte en un club de noche cuando se pone el sol.
Los hoteles en praia do forte son bastante modernos y muy cuidados, ofreciendo toda clase de actividades y servicios. La mayoría tienen piscinas, pistas de tenis, de voleibol, y otros deportes variados.
Los restaurantes ofrecen todos los rangos de cocina internacional imaginables, donde podemos comer la tradicional comida brasileña, hasta la japonesa, sudamericana en general y muchas más.