Las diferencias entre el transporte público y el privado son significativas e incluyen fondos, accesos y disponibilidad. El público está mantenido, al menos en parte, por los impuestos. En el transporte privado los fondos se consiguen por medio de compañías privadas en su totalidad. Para los viajeros, elegir entre uno y otro suele ser una cuestión de presupuesto, planes de viaje y la seguridad en cada una de las elecciones.
En muchos casos, los viajeros pueden encontrar que usando una combinación de ambas transportes puede ser la mejor opción. En muchos sitios, los autobuses, trenes o incluso ferries son un sistema de transporte público.
Mientras que los usuarios tienen que pagar por el uso de estos transportes que se han comentado, los precios son en parte pagados por medio de los impuestos. Normalmente el transporte público busca beneficiar a todos en general. Sus servicios son algunas veces limitados por la cantidad de dinero que recibe del gobierno.

Por este motivo, en algunas zonas los transportes solo funcionan durante unas horas al día. En algunas partes ni siquiera hay un transporte público. Cuando se viaja a otros países, esto es algo que hay que considerar.
Por otro lado, el transporte privado funciona de manera diferente. No suele estar subvencionado por el gobierno, y por este motivo suele ser más caro que otras formas de transporte. Un claro ejemplo de esto son los taxis, los cuales son gestionados por compañías determinadas o por una persona o varias personas autónomas.
También hay mini furgonetas privadas que llevan a los turistas por la ciudad para mostrarles lo más destacable. También pueden ser para llevarlos al aeropuerto. Estos medios pueden ser más cómodos para el usuario ya que pueden usarlos a casi cualquier hora. Los taxis por ejemplo pueden acceder a zonas donde los autobuses o trenes no llegan.
Otra diferencia entre estos dos transportes es que en el público hay que compartir el transporte con otras personas. Sin embargo en el privado se suele ir solo o con la gente que hemos elegido. Un transporte público suele parar varias veces en su trayecto para recoger o dejar a la gente, lo cual requiere más tiempo para hacer el viaje. Si el tiempo de llegada es un factor importante, el transporte privado puede ser la mejor opción. |